Rutinas para ser más productivo en la oficina tras la vuelta de vacaciones

La vuelta a la oficina tras las vacaciones siempre es un momento difícil, pero en un contexto tan excepcional como en el que nos encontramos, mantener la productividad en nuestro día a día puede convertirse en un auténtico desafío.

Para lidiar contra toda esta situación, a continuación hemos reunido una serie de consejos que te ayudarán a llevar a cabo la vuelta al trabajo con la máxima energía posible.

1. Adelantar el momento de irse a la cama

Durante los primeros días de trabajo, es habitual sufrir un exceso de cansancio. Al menos, hasta que volvamos a interiorizar nuestra nueva rutina diaria. Por esta razón es importante hacer un esfuerzo durante los días previos a la reincorporación, para ir adaptando los ritmos del cuerpo a los nuevos horarios. Estar descansado y dormir lo suficiente nos ayudará a lidiar contra el típico estrés del día a día.

Es recomendable cenar con la antelación suficiente para no acostarse con el estómago demasiado lleno. Evitar el consumo de alcohol durante los días previos también nos ayudará a garantizar la calidad de nuestro sueño.

2. La importancia de priorizar

Dependiendo del tipo de trabajo, es habitual sentir estrés durante los primeros días, especialmente en el momento de consultar nuestra bandeja de correo electrónico repleta o de revisar el estado de las tareas que hemos dejado pendientes.

Ser capaces de distinguir entre aquellas tareas que son importantes, de las que no lo son, nos permitirá centrarnos en los asuntos más urgentes. Por el contrario, querer responder todos los mensajes o abordar todos los asuntos puede crear un embudo de trabajo que haga que al final acabemos siendo menos productivos.

3. Comunícate con tus compañeros

Lejos de ser un tiempo perdido, puede resultar un tiempo bien invertido, sobre todo si se prepara convenientemente la reunión. Una reunión de equipo te permitirá priorizar mejor, tener una visión rápida del estado de los proyectos y evitará que pierdas el tiempo en asuntos ya resueltos.

4. Respeta los descansos laborales

Dedicar el tiempo libre de la jornada laboral a ponerse al día (por ejemplo, comiendo en menos tiempo), con el objetivo de resolver las tareas acumuladas cuanto antes, no solo aumentará nuestra productividad, sino que puede mermarla.

Debemos evitar sobrecargar el cerebro haciendo pequeñas pausas en la jornada laboral (tomar un café, levantarse un minuto a estirar las piernas…). Estos tiempos de receso son fundamentales para que logremos estar más concentrados el resto de la jornada.

5. Haz ejercicio

Según la Organización Mundial de la Salud, la actividad física es uno de los pilares básicos sobre los que se sustentan unos hábitos de vida saludables. Además, son muchos los estudios que han encontrado una incidencia directa del deporte sobre la productividad. No en vano muchas empresas fomentan que sus empleados hagan deporte, incluso en horario laboral.

6. Mantén alejadas todas las distracciones

Las distracciones son el gran enemigo de nuestra productividad laboral, sobre todo en un momento tan delicado para la concentración como la vuelta de las vacaciones.

Conviene que aspectos tales como el teléfono móvil personal, el smartwatch o nuestras redes sociales se mantengan alejadas de nuestro día a día durante los primeros días. También conviene silenciar canales de comunicación de la empresa en los que se traten temas no prioritarios, algo que puede distraer el foco de atención.

7. Un espacio de trabajo productivo

Por último, el espacio de trabajo y su adecuación es fundamental para asegurar una buena productividad. Debe tratarse de un espacio cómodo, con mobiliario ergonómico, en el que se disponga de una luz, una ventilación y una temperatura adecuadas.

Si necesitas un espacio de trabajo productivo, desde First workplaces podemos ofrecerte espacios de trabajo acordes a tus necesidades. Contamos con varios centros, en diferentes puntos de la geografía nacional, en los que empresas de todos los tamaños o profesionales autónomos pueden establecerse para trabajar en un espacio altamente productivo y, por supuesto, seguro.